Hay conceptos con los que siempre hemos convivido. Se suele decir “deseo que esto dure para toda la vida”, o por qué no, “para la eternidad”. Pero estos deseos llevaban a evocar sentimientos con respecto personas o cosas. Lo sorprendente es que ahora este lenguaje se aplica a la información que circula por la Red. Asusta saber que pueden ser espiadas nuestras comunicaciones, pero de tan conocido que es el fenómeno lo pasamos por alto. Pero eso de que “para toda la vida o para la eternidad” se aplique a aquella foto o aquel comentario vertido en la red, por uno mismo o por otros, en un determinado momento, y del que podemos arrepentirnos, comienza a inquietar a más de uno. Y asusta tanto como antes angustiaba lo de caer en el olvido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario